La digitalización de los entornos industriales ha puesto de relieve la transformación que vive el sector de la metalurgia. El Internet de las Cosas Industrial (Industrial Internet of Things – IIoT) es una de las consecuencias más visibles de la industria 4.0.
La crisis económica de 2008 y la crisis sanitaria de 2020 pusieron de relieve la necesidad de transformar las empresas. No sólo con las fórmulas del teletrabajo, que requiere que los datos con los que trabaja la compañía sean accesibles en todo momento y desde cualquier lugar, si no con máquinas más eficientes e inteligentes capaces de trabajar en una red interconectada.
El Internet de las Cosas Industrial ¿qué es y cómo va a cambiar la industria?
Cuando hablamos de dispositivos industriales interconectados nos referimos a máquinas realmente inteligentes. En nuestra imaginación aparecen escenas de cadenas de montaje del automóvil, en donde los robots ensamblan un coche en lo que parece una coreografía futurista. Esa es una de las aplicaciones de esta tecnología, pero ¿qué características debe tener una máquina para ser considerada IIoT?
- Interconexión: la máquina debe ser capaz de funcionar conectada a la red y de manera remota gracias a un software que también nos permita conocer los diferentes parámetros de la producción
- Autonomía: los dispositivos deben ser autónomos por sí mismo, sea con baterías para funcionar desconectados de la red eléctrica, como por su capacidad de programación.
- Energéticamente eficientes: la transformación digital también incorpora la necesidad de crear máquinas y dispositivos más eficientes y se traduzcan en una reducción del consumo energético.
- Sistemas de seguridad: al estar conectados a internet como un ordenador o una tablet, estos dispositivos deben estar protegidos contra un eventual ataque.
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En entornos industriales este tipo de dispositivos están llamados a cambiar la forma en que se produce y trabaja. No todos los sectores industriales vivirán la transformación de la misma manera, ni todos lo harán a la vez. Los dispositivos del internet de las cosas industrial permiten obtener datos muy valiosos sobre la producción, eficiencia e incluso los modos de jerarquizar las diferentes secciones de la empresa.
¿Qué beneficios tiene el IoT Industrial?
Las empresas del sector metalúrgico o cualquier otro sector industrial que apuesten por el internet de las cosas industrial, pueden mejorar sus procesos y eficiencia de producción gracias a los beneficios que trae la transformación industrial.
- Mejora de los suministros: los inventarios gestionados por sistemas basados en sensores permiten controlar mejor los componentes y suministros antes que se agoten. Además, permiten saber exactamente qué hay disponible en todo momento, anticipándose a picos y valles de demanda.
- Gestión de la planta: el IoT y el IoT Industrial permiten gestionar los sistemas de climatización e iluminación, o conocer el nivel de producción y el cumplimiento de los objetivos.
- Aumento de la producción: la mejora de la eficiencia también implica una mejora de la producción total. Las máquinas del internet de las cosas industrial generan datos en tiempo real, tanto de la situación de la máquina en sí como de la producción. Eso permite tomar decisiones a partir de parámetros reales y evaluar su impacto.
Internet de las cosas industrial y FAT
La empresa FAT empezó su proceso de transformación digital en 2018 y apuesta tanto por la gestión de suministros y recambios basados en un inventario digital, como la comercialización de máquinas de corte que pueden conectarse a internet. Máquinas como la FAT 460TC A DC, que nos permiten acceder a todos los datos de funcionamiento y producción en tiempo real, además de ofrecer estadísticas de producción que pueden ser analizadas.
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En un futuro, FAT espera presentar adelantos técnicos basados en los datos que ofrecen las sierras de corte que incorporan conectividad y que ofrecen datos que pueden ser analizados. Cambios tecnológicos que quieren posicionar a FAT como un referente de empresa metalúrgica que avanza en la transformación digital, la industria 4.0 y el Internet de las Cosas Industrial.